miércoles, 3 de junio de 2009

Edipo

Yo voy a ser absolutamente feliz el día que conozca un hombre que me cuide. El día que un tipo se emocione por mí como nadie. El día que un hombre se juegue la vida solo por mi existencia. El día que la persona que esté a mi lado me diga siempre la verdad, pero dulcemente. El día que alguien dedique sus respiros por mí. El día que admiren mis virtudes, pero también saquen lo bueno de mis defectos. El día que yo sea lo más importante del mundo para alguien. El día que mi felicidad sea la prioridad del otro. El día que me amen sin reparos. El día que un hombre me banque todos los caprichos. El día que alguien piense en mí al menos un ratito todos los días. El día que alguien se mueva para que yo cumpla mis sueños. El día que una persona me respete tal cual soy.

El día que alguien me quiera incondicionalmente. Como mi papá.


3 comentarios:

Liliana dijo...

Que nos ame un hombre es que debe ser incondicional... como nuestro padre.
Ja, simplemente hermoso... y verdad absoluta.

Qué bueno que estás de vuelta.

Besos púrpuras.

GoodOldLeon dijo...

Hola! hoy recién tengo respiro de la facultad y de los examenes (que no son todos de la facultad)

No sabés cuanto me alegro que hayas vuelto... tenés una forma muy particular de escribir, muy genial... creo que ya te lo había dicho, no sé, fue hace bastante tiempo y a mi los ayeres me cuestan bastante.

El tema de querer incondicionalmente es que hay que saber y estar dispuesto a todo... y el miedo, es lo único que creo que nunca vamos a aprender a manejar... aún así, es demasiado posible, solo hay que verse a la cara, mirarse bien a los ojos para darse cuenta de verdad en que estamos metidos.

Un abrazo Merlina, que andes bien

Lola dijo...

En ese caso, sería complejo de Electra.... que tengo entendida es la versión femenina de Edipo en la mitología.